Las remontadas sufridas por el
Real Madrid y el PSG en los octavos de final después de haber logrado
marcadores favorables en los partidos de ida pueden servirnos para valorar
hasta que punto en estos casos cobra la importancia la preparación mental de
cara al partido de vuelta y como el exceso de confianza viéndose ya
clasificados puede jugar un papel importante. En el lado opuesto los equipos
rivales que teniéndolo muy complicado creen en sus posibilidades. Motivar a
estos últimos a priori debe ser más sencillo pero..¿ a los que ya se ven
clasificados?.
Casos similares recientes podemos
citar las eliminaciones de PSG frente al Barcelona después de un 4-0 en la ida
y el Barcelona frente a la Roma después de un 4-1 en la ida.
Como vemos el PSG es reincidente,
más aun incluso si incluimos la eliminatoria en la que el Chelsea con un 2-0 le
remonta el 3-1 del partido de ida
(temporada 2013-14). A continuación en el siguiente video podemos observar
la conversación que mantenía Verratti,Matuidi,Meunier y Draxler días antes de la
eliminatoria frente al Barcelona.
Podríamos revisar cada partido,
analizarlo tácticamente y revisar decisiones tanto de los técnicos como de los
jugadores y seguro que nos encontramos algunos detalles muy llamativos. Por
ejemplo el PSG en ese partido frente al Barcelona solo completó 4 pases del
minuto 85 al 95 y 3 fueron para sacar de centro después de los goles del
Barcelona.
En este sentido por ejemplo para
situaciones de este tipo me parece interesante esta explicación de Gaizaka
Garitano durante su etapa en el Deportivo que podemos encontrar en la entrevista de Juan Cudeiro.
Como vemos son situaciones que
podemos tratar de evitar con un trabajo táctico en alguna tarea o mentalizando
al equipo durante la semana o sesiones previas. Tareas de este tipo pueden
ayudar a hacer que el jugador este prevenido y preparado para ciertas
situaciones o que perciba que la eliminatoria no está resuelta.
Además de esto,
también puede adquirir importancia los mensajes que se envíen directa o
indirectamente en las ruedas de prensa o por ejemplo con la rotación en el
partido anterior o incluso como el caso reciente de la amarilla provocada por
Sergio Ramos. Cada detalle puede ser importante o sumar para que el equipo
adquiera un estado de relajación o exceso de confianza. En este sentido sería
interesante conocer si se realiza o puede llevar a cabo un trabajo especifico
desde el psicólogo del cuerpo técnico (o club) y cómo enfocarlo o aconsejar al
técnico y poder evitar en la medida esa relajación o situaciones de bloque
durante el partido cuando el resultado empieza a volverse en contra.
Otra pregunta que lanzaría es hasta que punto pueden perjudicar o influir portadas de este tipo. ¿Son apropiadas? ¿Pueden influir al jugador? ¿Conviene que se traslade esa sensación de favoritismo al entorno y la afición?
Es interesante y recomiendo sobre este tema el capitulo “Sangre en la boca” del libro “La Metamorfosis” de
Marti Perarnau en el que Manel Estiarte
reflexiona sobre la competitividad de los grandes equipos y defiende la idea de
que “los grandes equipos, los muy grandes, se han acostumbrado tanto a ganar
que no conciben estar perdiendo. No les ocurre a todos ni les ocurre siempre,
pero veo muchas coincidencias, demasiadas. Tengo la impresión de que los
equipos grandes no están acostumbrados a perder, no tienen en sus planes el
concepto de una derrota, sobre todo cuando son favoritos. Y basta con que el
rival, por la razón que sea, porque está muy fino o porque tú estás espeso, se
te adelante un poco en el marcador para que te hundas.
Manel Estiarte profundiza en esta
idea poniendo varios ejemplos, entre ellos la derrota frente al Real Madrid cuando
acompañaba a Guardiola en el Bayern de Munich.
Un aspecto que quiero mencionar
antes de acabar este articulo es el hecho de la importancia de que el
entrenador haya barajado la posibilidad de tener que hacer algún cambio durante
el partido para contrarrestar al equipo rival y que haya previsto cualquier
imprevisto o simplemente para que el equipo reaccione o cambiar el plan de
partido. En algunos de estos casos comentados anteriormente llama la atención
por ejemplo que Ernesto Valverde no hiciese ningún cambio frente a la Roma en
el minuto 81 cuando estaban a un solo gol de quedar eliminados (los otros dos
llegaron después del gol de la Roma) o que Solari dejase fuera de la
convocatoria frente al Ajax a Mariano y a Isco, especialmente al delantero, sin un recambio en el banquillo de ese perfil.
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