“Quien se atreve a enseñar nunca debe dejar de
aprender”
Comienzo hoy
compartiendo una de las frases que más me gustan y que se puede aplicar a
distintos ámbitos, la escuela, la educación tus niños y también el fútbol base.
En cualquier profesión o disciplina uno debe tratar de seguir formándose y
tratando de mejorar pero más si cabe en la docencia y formación de los más
jóvenes. Cuanto mejor preparados estemos mayor será el número de conocimientos
les podremos aportar o estaremos en mejores condiciones para superar las
dificultades puedan aparecer. Desde conocimientos propiamente dichos o un mejor
dominio de situaciones de carácter psicosocial que nos puedan ayudar a
comprender comportamientos o motivarlos.
Dicho esto voy
a darle una vuelta a la tortilla y a tratar de explicar lo que he aprendido yo
en estas primeras semanas gracias a ellos, mis cadetes, porque a veces también
tienen mucho que enseñarnos y quizá a alguno le pase como a mí hace un año.
Hace un año
fruto de mi escasa experiencia por un lado y el hecho de que tenía la sensación
de que a un niño no le gusta que le griten la verdad es que en el banquillo
quizá era poco expresivo. Pasado este tiempo y en estos primeros partidos me he
dado cuenta de la necesidad de hacer más indicaciones porque al final no es
“gritar” sino que son correcciones o comentarios necesarios para que el jugador
no desconecte del partido. Y que en ocasiones las cosas no es que habrá que
repetirlas dos veces, sino que habrá que hacerlas cinco y quizá recordarlas en
el próximo entrenamiento y llegará el próximo partido y habrá que repetirlas
pero ya sólo serán tres veces o en algún caso ya no será necesario. Y es que en
eso consiste el proceso de aprendizaje. Equivocarse, corregir y a base de
repetir vayan interiorizando conceptos y la forma de actuar.
Otro aspecto
en el que quiero incidir es en la importancia de una buena comunicación y es
uno de esos que siempre podremos tratar de mejorar. Nuestra forma de
expresarnos puede ayudar mucho. Hay situaciones que pueden ser más improvisadas
( pensemos por ejemplo durante el partido) pero por ejemplo otras como pueden
ser las explicaciones de los ejercicios durante un entrenamiento sí que las
podemos dentro de lo que cabe preparar. Nos saldrán mejor e iremos mejorando
nuestra forma de comunicar y en ocasiones también mismo nosotros entenderemos
mejor el ejercicio o estaremos preparados para posibles preguntas. Una buena
explicación de un ejercicio aunque nos pueda llevar un poco más de tiempo puede
ser la diferencia entre que el ejercicio salga bien o salga mal.
Y si con algo
me quedo de lo aprendido en estas primeras semanas es que de las cosas más
reconfortantes que da el entrenar en el fútbol base es poder comprobar el
crecimiento y la mejoría de tus jugadores. Una de esas sensaciones difíciles de
explicar y que no tod@s pueden entender. Una de esas cosas por las que uno
disfruta siendo entrenador en la base.
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