martes, 25 de septiembre de 2012

Recuerdos de infancia (I): Depor 4-Milan 0...cuando lo imposible no lo es.


Hoy quiero inaugurar una sección que bajo el título de “Recuerdos de infancia” irá poco a poco recogiendo artículos de jugadores que en su momento me llamaron la atención, descripciones de algún equipo o crónica de algún partido que por algún motivo quedó grabado en mi memoria.

Varios candidatos a ser protagonistas de este primer post, pero si bien ya no era un niño me he decidido por un partido que tuve la suerte de vivir en directo. La gran noche europea del Deportivo. Muchos la recordaréis. Situémonos primero en un 23 de Marzo del 2004, el  Deportivo después de eliminar en los octavos de final a la Juventus se enfrentaba al vigente campeón, el Milán dirigido por Ancelotti de los Kaká,Pirlo, Shevchenko y compañía. En el partido de ida pese a que se había adelantado el Deportivo por mediación de Pandiani  el conjunto italiano en un inicio de segunda parte arrollado le endosaría cuatro goles en apenas ocho minutos. Con ese resultado de 4-1  finalizó el partido y parecía que la andadura del conjunto gallego esa temporada en Europa.

Pero dos semanas más tarde sucedió lo impensable. Una de esas noches en las que el fútbol demostró que lo que parece imposible puede suceder y porque este deporte es tan grande.

Parece mentira que ya hayan pasado 8 años. Un Miércoles 7 de Abril, para muchos inico de las vacaciones de Semana Santa. Pocos podían creer en la remontada, es más fue este motivo el que me llevó a poder disfrutar del partido en el propio campo. A mí y a un buen número de jóvenes corcubioneses ya que el Deportivo dado que el ritmo de venta de entradas no invitaba a pensar en un lleno tuvo la brillante idea de regalarlas a un buen número de ayuntamientos. Ya el viaje en sí era toda una aventura. Cincuenta jóvenes metidos en un autobús camino de un partido de Champions. Para muchos yo incluido el primero. A medida que se acercaba el comienzo se empezaba a sentir en el ambiente ese rum-rum de noche grande. La iniciativa había surtido efecto y el campo presentaba un aspecto inmejorable.

A ello ayudó que cuando apenas habían transcurrido cuatro minutos el Rifle Pandiani en un buen movimiento al borde del área consiguió batir a Dida metiendo a la afición aún más en el partido y consiguiendo que los que no creían empezaran a hacerlo. Pasaban los minutos y el marcador no se movía pero la sensación era que se podía lograr y que un gol más metería el miedo en el cuerpo al conjunto italiano. Y ese gol llegó en el 35, cuando don Juan Carlos Valerón aprovechando el fallo en la salida remataba de cabeza un centro servido desde la izquierda por parte de Luque. El gol volvió loco al estadio que veía que estaba a tan sólo un gol de jugar por primera vez unas semifinales de la máxima competición continental.

Corría el minuto 44 de la primera parte cuando Molina sacó de portería, la defensa italiana no acaba de despejar el balón que llega a los pies de Luque. El catalán tras regatear a un defensa se planta solo ante Dida y con un soberbio trallazo a la escuadra firma el 3-0 que en ese momento los clasificaba. El estadio era una fiesta y con este resultado se llegó al descanso.

En la segunda parte el Deportivo siguió dominando y se veía un Milán totalmente superado si bien con la calidad que tenían sus jugadores (Kaká, Pirlo, Seedorf, Shevchenko, Inzaghi) uno no podía estar tranquilo.Finalmente en el 76 Fran que había entrado sustituyendo a Luque marcaría el 4-0 que acabaría siendo el resultado final. Víctor centró desde la banda derecha y el balón llegó al gran capitán blanquiazul que engancha una volea que después de rebotar en Cafú se acaba colando en la portería defendida por Dida.

En los minutos finales el Milán buscó tímidamente el gol que forzara la prorroga pero no lo logró, se había conseguido el milagro, se había logrado la remontada imposible, se había clasificado por primera vez para unas semifinales de Champions.

La fiesta comenzó en el estadio, pero siguió en el bus, el bus de la juventud de Corcubión, 100 kilómetros de fiesta improvisada, cánticos y locura generalizada. Visita obligada a los bares que permanecían abiertos y baño incluído para algunos en la que por una vez fue nuestra fuente de Cuatro Caminos.

Ese día daba igual fueras de Depor, Barcelona o Madrid, ese día era un día para disfrutar, una noche irrepetible, una noche para la historia.

4 comentarios:

  1. uffff, k gran partido, e k vellos vamos indo, xa fai 8 anos,

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  2. Impresionante sin ninguna duda. saludos! http://elblogdebruno1.blogspot.com

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  3. Como me acuerdo de ese partido... todos éramos del Dépor.

    Saludos desde La Escuadra de Mago

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  4. Piel de gallina Kiko, así te lo digo. Lo recuerdo como si fuera ayer. Forza Depor!!

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